Una Colaboración de Herbolario Sol de Invierno
Artrosis, artritis, displasia… palabras que “duelen”, pero que lamentablemente usamos en muchos casos cuando vamos a la consulta del veterinario.
La artritis reumatoide es una enfermedad inflamatoria de carácter autoinmune que provoca la degeneración progresiva de las articulaciones, mientras que la artrosis está causada por el desgaste del cartílago que une los huesos y las articulaciones.
Las dos tienen el denominador común de provocar dolor e inflamación, además de la pérdida progresiva de movimiento en la articulación. Aunque pueden ser enfermedades congénitas y recientes estudios apuntan a causas de carácter inmunológico, lo más habitual es que se deban al desgaste de las articulaciones provocado por el paso del tiempo.
El tratamiento veterinario convencional para estas dolencias se basa en medicamentos AINE (Antiinflamatorios no esteroideos) para aliviar el dolor, pero que tienen efectos secundarios en muchas ocasiones: vómitos, diarreas, úlceras estomacales, etc.
Además, si se toman durante periodos prolongados pueden producir efectos negativos sobre órganos vitales como el estómago, el hígado y el riñón. Es lo mismo que nos ocurre a muchos animales humanos si tomamos grandes dosis de ibuprofeno y durante mucho tiempo.
La pregunta es, ¿no hay opciones sin efectos secundarios para que no sufran dolores nuestros perros y gatos? La respuesta es sí y está, como casi siempre, en la Naturaleza. Las alternativas son diversas:
Los condoprotectores aportan mayor resistencia y elasticidad a las articulaciones y tejido conjuntivo y también pueden estar elaborados con plantas como el harpagofito, el árnica, la cola de caballo, la cúrcuma, la boswellia, alfalfa o la yuca que poseen propiedades antiinflamatorias.
Por su parte, para nutrir las articulaciones y a eliminar toxinas son muy beneficiosas plantas como la ortiga y el diente de león.
El aceite de linaza también es recomendable porque aporta ácidos grasos omega-3, así como los suplementos que contienen glucosamina, condroitina, vitamina C y MSM porque son nutrientes que ayudan a preservar y nutrir el cartílago de las articulaciones afectadas.
Todas estas opciones son fáciles de administrar, ya que se presentan en formato líquido, en cápsula o en polvo.
Simplemente hay que añadir la cantidad indicada en cada caso a la comida de nuestro perro y ser constantes para lograr que sean efectivas.
Los aceites vegetales de árnica, abedul, cáñamo o lino son otra gran ayuda para aliviar dolores articulares, tanto aplicados externamente con suaves masajes como ingeridos si el animal lo elige así (zoofarmacognosis aplicada: el animal escoge lo que le sana).
En este último caso, solo debemos ofrecer aceites vegetales aptos para ingerir y evitando esta opción si nuestro perro o gato sufre pancreatitis.
Las sesiones de acupuntura regulares disminuyen el dolor al estimular los nervios, aumentar la circulación sanguínea, aliviar los espasmos musculares y causar la liberación de hormonas como las endorfinas y cortisol.
Ana del Moral, veterinaria especializada en Medicina Tradicional China, explica: “Es una técnica orientada que al aliviar el dolor en casos de osteoartritis o displasia, por ejemplo, permitiendo disminuir la medicación que se emplea para combatirlo.
Pero, además, al buscar el equilibrio del organismo en su conjunto, es útil en multitud de dolencias como la epilepsia, el síndrome vestibular, la mielopatía degenerativa, las úlceras gástricas, las alergias, la insuficiencia renal, etc.
No hay que olvidar que la acupuntura está recomendada por la Organización Mundial de la Salud para el tratamiento de 43 afecciones”.
El masaje TuiNa es uno de los pilares de la Medicina Tradicional China y se basa en una serie de movimientos, fricciones y estiramientos que tienen en cuenta el sistema de meridianos que recorren el cuerpo.
Es muy útil en problemas musculoesqueléticos, como las displasias, o como parte de la rehabilitación postquirúrgica de cirugías traumatológicas, y no es complicado aprender los movimientos básicos y aplicarlos en casa a nuestro perro o gato.
También hay que recordar que el sobrepeso es una agravante en estas dolencias, ya que supone una carga adicional a las articulaciones, por lo que cuidar la dieta es vital.
Además, es recomendable que tanto dieta cruda natural (BARF) como pienso y comida húmeda preparada sea de calidad, no lleve aditivos artificiales y se enriquezca “extras” como plantas medicinales como harpagofito o cola de caballo, o nutrientes como mejillón de labio verde.
Por último, recordar que el dolor de articulaciones no debe llevar al sedentarismo a nuestro peludo.
Un nivel de actividad adaptado a cada caso es muy importante. Por eso, te animamos a dar paseos cortos, pero frecuentes y a jugar en casa para que se ejercite y estimule mentalmente.
Esther García, responsable de Herbolario para animales Sol de invierno
Herbolario Sol de invierno, para ti y tu mascota
www.herbolariosoldeinvierno.es
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